jueves, 3 de noviembre de 2016

Un nuevo comienzo

Tras el paso del esperadísimo Half Term, el disfrute (o no tanto) de mi soledad en la casa con la única compañía de mi reina Flora así como mi nueva aventura en la cocina haciendo por primera vez lentejas (que reultaron ser un éxito entre los padres y Theo, Riley comió apenas dos cucharadas obligadas...You must eat some of them because Daniel has prepared it for us!, decía la madre) para la vuelta del viaje y amenizadas con el relato de algunas historias y anécdotas del viaje, volvía la normalidad a nuestras vidas...o quizá no tanto.


Al día siguiente llegaba aquello que venía rondando desde aquel 14 de Julio en el que tuve la primera entrevista con la madre...We will probably move in October to a village near Rileys school, which is nearer to London y que ha sido tema de más de una y de dos conversaciones entre los padres estos meses (les ha dado algunos quebraderos de cabeza la firma del nuevo inquilino)...llegaba la mudanza a una nueva casa para estar más cerca del colegio de Riley, fundamentalmente (sí a mi también me resulta extraño que decidan montar todo el follón casi exclusivamente para estar más cerca del colegio, pero es de admirar, la verdad...) pero también más cerca de Londres y, por lo tanto, del trabajo del padre...lo cual facilita más las cosas y nos permite llevar una vida un poco más relajada.

Ese día fue una locura, al trajín de los chicos de la empresa de mudanzas "Luxfords on the Weybridge" (que empaquetaron la casa en tres días...imaginaos la cantidad de cajas, creo que se podría construir otra casa sólo con las cajas xD), se le sumaba el vainvén de Magda (la mujer de la limpieza) dando los últimos coletazos a la limpieza general para que todo quedara estupendo para el nuevo inquilino y el frenesí del padre - la madre se fue por la mañana a llevar a Riley y a gestionar papeles- por controlar que todo estuviera yendo de la mejor manera posible. Entre todo eso yo ejecutaba algunas tareas que me mandaba el padre - limpiar las hojas del estanque de la entrada, tapar pintando algunas manchas en las paredes, etc...- y a despedirme de los rincones de esa mega-casa que me había acogido dos meses y a la cual ya estaba apegado de cierta manera.

El "magnífico día" no podía ser acabado de otra manera que con un "magnífico contratiempo" que hizo trastocar los planes de Imogen...¡¡¡¡TANTANTAAAAN!!!!...los hombres de la mudanza, que deberían haber sido cinco, fueron dos...lo que provocó que todo se retrasase y las cosas llegaran a la casa a las 19 horas (dos horas más tarde de lo previsto).




La ira de Imogen no tardó en aparecer soltando algún que otro That´s ridiculous!! That´s not the way we want to move!! al aire, pero todo pareció apaciguarse cuando, después de llegar del "Trick or treating", tradicional en la noche de Halloween con Riley - una experiencia la mar de curiosa, os dejo alguna foto- los hombres de la mudanza aparecieron y depositaron alguna de las miles de cajas que daban forma a la casa y que continuarían trayendo hasta dos días más tarde.

Parecía que todo marchaba, que por fin tras meses de espera llegaba el momento que estaban deseando, mudarse y comenzar una nueva (y más fácil) vida en otro lugar de Inglaterra, para ser más exactos Thames Ditton, un pueblo similar a Godalming, a las orillas del río Thames, a 30 minutos andando de Surbiton y a 20 escasos minutos en tren de Londres. Thames Ditton es, como he dicho, bastante parecido a Godalming, quizá algo más grande pero la verdadera joya - o al menos para mí- del lugar es Surbiton, que se acerca más a lo que yo conozco y me gusta para un sitio para vivir y para disfrutar del tiempo de ocio...es mucho más grande, tiene ese frenesí y movimiento de gente que me gusta y tiene muchos más recursos a los que acudir en distintas ocasiones...compras, tomar algo, simplemente pasear etc...





La nueva casa tiene tres plantas y un estilo mucho más inglés y es "menos increíble" que la otra casa...What do you think about the house? - me decía el padre la primera noche- Well, I love the other house but this is not bad... - le respondía entre risas- está renovada por dentro lo cual le da un aspecto moderno y goza de todas las comodidades como no podía ser de otra manera tratándose de los Osborne. El auténtico puntazo de la casa es mi habitación (en el tercer piso únicamente junto a la habitación de Theo) abuardillada y ¡con baño propio! -que tengo que compartir con Theo, pero únicamente los fines de semana-lo cual me da muchísima más independencia.




















Con esto, doy por iniciado "un nuevo comienzo" en mi aventura, un punto y a parte en mi estancia en Reino Unido que hace que vuelva a tener esa sensación del principio de no encontrar mi hueco aquí pero que seguro se irá mitigando a medida que explore la nueva zona y conozca gente. Un nuevo comienzo que me da, por un lado, más cosas a echar de menos - Madrid y Godalming, mi familia y amigos de Madrid y mis amigos en Godalming, mi casa y la mega-casa de Godalming etc...- pero, por otro lado, la oportunidad, de nuevo, de conocer otras cosas, poder viajar más barato y más rápido a Londres, conocer más gente...en fin, creo que la balanza se decanta por el extremo positivo, así que...¡A POR ELLO!.



PD: Os dejo fotos de una cosa que he descubierto y me ha encantado... tiendas de ropa, comida etc. "benéficas" que supongo donaran parte de lo que ganen a distintas causas, os informaré más sobre ello.

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